Hoy vamos a mezclar Halloween con ciencia. Os vamos a enseñar un sencillo experimento de Física para los más peques en el que podemos jugar con un fantasma que ha quedado atrapado dentro de una botella. Sólo necesitas un guante, la anilla de tu llavero y una botella de agua, ¿te atreves? ;)
Materiales:
- Un guante de goma (como los que usamos para fregar)
- Una o dos anillas (en las que ponemos las llaves)
- Un rotulador negro (si puede ser, permanente)
- Tijeras
- Una botella grande
- Agua
Procedimiento:
Lo primero que tenemos que hacer es cortar el "dedo" de un guante, por ejemplo, el que corresponde al índice. Para convertirlo en nuestro fantasma particular, tan sólo tenemos que dibujarle un par de ojitos y una boca con el rotulador negro. Opcionalmente, también podemos recortar la parte de abajo haciendo pequeños triángulos para decorarlo.Para que el experimento funcione, tenemos que introducir una anilla dentro del "fantasma", de forma que quede fijada en el medio. Es posible que una sola anilla sea demasiado ligera, así que tendremos que probar con dos y hasta con tres si el peso no es suficiente para que el fantasma se mueva.
Finalmente, introducimos el fantasma en una botella llena de agua y ponemos el tapón para que quede "atrapado". Ahora, simplemente apretamos con las manos la parte inferior de la botella y comprobaremos cómo nuestro pequeño fantasma (que flotaba) comienza a bajar. Si soltamos, volverá rápidamente a la superficie. Podemos jugar a apretar con mayor o menor fuerza para intentar que se desplace más lentamente o incluso conseguir mantenerlo en el medio.
Explicación:
¿Por qué cuando apretamos la botella el fantasma baja y cuando dejamos de hacerlo el fantasma flota?Es muy sencillo. El fantasma, al meterlo en la botella, flota porque en ese momento el empuje del agua es igual al peso del dedo de goma con la/s anilla/s. En cambio, cuando hacemos presión en la botella lo que ocurre es que se introduce una pequeña cantidad de agua dentro del fantasma y aumenta su peso, eliminando el equilibrio y provocando que el peso venza al empuje del agua y baje. Cuando dejamos de apretar, el agua vuelve a salir y las dos fuerzas vuelven a estar en completo equilibrio, por lo que tiende a flotar.
En este vídeo de ExpCaserosKids podrás ver el resultado de este curioso experimento de Física:
impresionante
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