<h1>Cómo hacer plata falsa</h1>

Hoy os enseñamos una manera muy sencilla y científica de convertir cualquiera de nuestras monedas en una de plata (al menos en apariencia). Bromea con tus amigos pagándoles con una de estas y observa la cara que se les queda.

Materiales:

- Salfumán o aguafuerte
- Agua
- Estaño
- Una pila de 9V
- Cable de cobre
- Un recipiente de vidrio (como un vaso)
- Clips
- Una moneda u objeto que queramos "convertir en plata"

Procedimiento:

Antes de empezar, os recordamos que hay que tener muchísimo cuidado con el salfumán, ya que es un producto muy fuerte que puede dañar nuestra piel. En ningún momento debemos entrar en contacto directo con este líquido.

Una vez tomadas las precauciones, empezamos con el experimento. Echamos un poquito de agua en un vaso o cualquier otro recipiente y le añadimos exactamente la misma cantidad de salfumán o aguafuerte.

Por otro lado, limpiamos bien las monedas u objetos que vayamos a utilizar con un buen desengrasante. Es importante que no quede ningún resto para que la "plata falsa" se adhiera perfectamente a ellas.

A continuación, tenemos que unir los cables de cobre a la pila. Lo más fácil es usar unos cocodrilos, pero si no disponemos de ellos siempre podemos utilizar un trocito de cinta aislante. En el otro extremo del cable que va unido al lado positivo de la pila colocaremos un poco de estaño (hecho una bolita). Y en el cable que va al lado negativo colocaremos la moneda, enganchada con un par de clips.

Ya solo queda introducir tanto el estaño como la moneda en el vaso con la mezcla que hemos preparado previamente y fijar los cables a los bordes del vaso. La estructura del circuito deberá ser parecida a esta:

Si lo hemos hecho bien, empezarán a salir unas burbujitas de la moneda. En cuestión de minutos, la moneda adoptará un color muy oscuro:

Para limpiarla la metemos en un recipiente con agua y, para sacarle brillo, echamos un poco de bicarbonato sódico en un trapo húmedo y restregamos la moneda en él. En un ratito, nuestra moneda parecerá que está realmente hecha de plata. ¡Y más brillante que nunca!

Explicación:

Las moléculas del estaño se han convertido en iones metálicos y han viajado a través de la solución (compuesta por agua y salfumán) hasta la moneda, recubriéndola de pequeñísimos cristales metálicos. Por tanto, lo que hemos hecho en realidad con esta reacción es un recubrimiento electrolítico con una apariencia similar a la de la plata.





Aquí está el vídeo de ExpCaseros con todo el proceso y los resultados: