<h1>Cómo hacer un huevo saltarín que brilla en la oscuridad</h1>

Hoy vamos a hacer un curioso y divertido experimento con el que podréis participar en vuestras ferias de ciencia y dejar alucinados a todos vuestros compañeros. De una manera muy sencilla, vamos a convertir un simple huevo en un huevo radiactivo que brilla bajo luz ultravioleta.

Materiales:

- Un subrayador amarillo
- Vinagre
- Un huevo
- Bombillas de luz negra

Procedimiento:

Lo primero que tenemos que hacer es llenar una taza o un tarro con vinagre. El siguiente paso es quitar la tapa del subrayador y extraer el tubo de tinta amarilla. A continuación, vertemos toda la tinta en la taza donde tenemos el vinagre. Cuando la mezcla esté preparada, introducimos el huevo dentro y lo dejamos reposar durante 48 horas. Veréis que, cuando el vinagre empiece a actuar, comenzarán a salir pequeñas burbujas de la cáscara del huevo.

Pasados dos días, nuestro huevo ya estará listo y podremos sacarlo. El resultado os asombrará. El huevo se vuelve traslúcido y podemos incluso ver la yema en su interior. Además, la cáscara ha desaparecido y está totalmente blando, como si fuera de goma, y hasta rebota si lo dejamos caer al suelo.

Ahora viene la parte más divertida. Encendemos nuestras bombillas de luz negra y apagamos el resto de luces. Como veréis, el resultado es impresionante. ¡Hemos fabricado un huevo radiactivo! Llama muchísimo la atención que, en cuanto recibe la luz ultravioleta, el huevo empieza a brillar desde dentro hacia fuera. Incluso podemos ver la yema moviéndose dentro del huevo.

Ahora podemos jugar con él a botarlo pero tened cuidado a la hora de tirarlo a cierta altura porque puede llegar a explotar.



Como habéis visto, es un experimento muy sencillo y muy divertido de hacer así que os animamos a que lo probéis y lo utilicéis para sorprender a vuestros amigos y familiares o incluso para ferias científicas y trabajos del colegio.



Si queréis ver cómo lo hemos hecho en ExpCaseros, aquí os dejamos nuestro vídeo para que veáis el procedimiento y lo bien que nos lo hemos pasado jugando con el huevo radiactivo: