Hoy vamos a hacer un experimento muy curioso. Lo que vamos a comprobar es si podemos colocar un vaso de agua boca abajo encima de otro vaso con agua y luego separarlos sin que el agua que hay dentro se caiga. ¿Lo conseguiremos?
Materiales
- Dos vasos de vidrio (como los de yogur)- Una carta
- Monedas de diferentes tamaños
- Agua
Procedimiento
El primer paso es llenar los vasos de vidrio con agua hasta arriba.
El siguiente paso es colocar la carta encima de uno de los vasos. Si le damos la vuelta, la carta no caerá, ni tampoco el agua, así que lo colocamos justo encima del otro vaso.
Muy despacio tenemos que retirar la carta. Veremos que los vasos han quedado bien colocados y el agua no se cae.
Pero, ¿qué ocurriría si separamos un poco los vasos? Lo lógico es pensar que el agua se caerá, ¿no? ¡Vamos a comprobarlo!
En primer lugar, cogeremos dos de las monedas más pequeñas que tengamos e introduciremos una por cada lado. Como veremos, el agua no se sale.
A continuación podemos dificultar un poco el experimento insertando monedas más grandes o incluso dos monedas a cada lado y comprobaremos que el agua no se cae.
Explicación
Como habéis visto, podemos introducir las monedas perfectamente sin que el agua se caiga pero, ¿por qué?El agua no se cae debido a la tensión superficial, que es una especie de malla que tiene dos funciones. Por un lado, sujeta el agua para que no se caiga y, por otro lado, no deja entrar el aire.
Como ya sabéis, para poder vaciar un recipiente de agua, tiene que entrar aire pero, si no sale el agua, el aire no puede entrar y es por eso que el agua no se cae.
Seguro que os ha encantado este experimento tan curioso y que os ha resultado mucho más fácil de lo que parecía. Os dejamos aquí el vídeo de Expcaseros donde podéis ver cómo lo hemos hecho nosotros:
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